Nico Willliams se perdió el último derbi ante la Real Sociedad y es duda para jugar el jueves el partido de vuelta de la semifinal de Europa League frente al Manchester United. El extremo internacional, que este lunes no ha participado en la sesión de entrenamiento junto a sus compañeros, acusa problemas desde tiempo atrás y en los últimos partido ha sentido las molestias de manera más aguda. “El jueves no terminó muy bien”, destacó Valverde, que le sustituyó en el tramo final del partido de ida ante el United y no pudo alinearle en Anoeta. Nico tiene el partido de Old Trafford en el alero. Igual que Sancet, que se recupera de una lesión en el bíceps femoral que le impidió alinearse en la ida. Los dos no han entrenado con el grupo este lunes pues siguen una pauta específica.
Los internacionales españoles tienen muy difícil estar en el partido de vuelta.
Nico acumula 50 partidos esta temporada (44 con el Athletic y 6 con la selección) y la pubalgia le ha cogido con fuerza. El extremo compitió el pasado curso a máxima intensidad hasta el último partido de la Eurocopa (14 de julio) y un mes después estaba ya de nuevo actuando en la Liga. El menor de los hermanos Williams suma 3.525 minutos de juego en este curso y la pubalgia le está pasando factura.
Los médicos y el futbolista tienen que decidir cómo afrontar el tratamiento de la misma. Por ahora, el delantero sigue un plan de descanso y readaptación, pero antes del verano habrá que tomar decisiones: tratamiento conservador o quirófano. El tratamiento conservador ha tenido buenos resultados en Sancet, que ha seguido una rutina en Pamplona con Jurdan Mendiguchia, y la intervención quirúrgica, que es conocida por otros miembros de la plantilla, acorta el tiempo de la recuperación si bien tiene una serie de condicionantes que no afectarían en caso de optar por un tratamiento conservador.
Los médicos y fisioterapeutas del club no descartan recuperar a Nico Williams para el partido de Manchester y que también pueda tomar parte en más de uno de los encuentros que restan para la finalización del campeonato. Dependiendo de cómo responda a la puesta a punto inmediata, independientemente de cuál sea la postura que se adopte después para un tratamiento, el futbolista podría llegar a la fase final de la Nations League con la selección española, pues sólo se encaran dos partidos.
