La Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia (ANPB) y las nueve asociaciones departamentales de periodistas del país condenaron las amenazas y los amedrentamientos de parte de representantes del autodenominado Estado de Kailasa a varios medios bolivianos.
Según señalaron, resulta inadmisible que se pretenda censurar mediante coacciones ilegales e infundadas. “La exigencia de retractaciones, eliminación de contenido y disculpas públicas por parte del ficticio Estado de Kailasa no solo vulnera los principios de transparencia y derecho a la información, sino que constituye una estrategia de intimidación inaceptable”, señala la asociación en un pronunciamiento al respecto.
Las asociaciones de periodistas reivindicaron que la información sobre los acuerdos irregulares entre grupos indígenas bolivianos y Kailasa fue propocionada según los principios de verificación, rigurosidad y apego a la verdad, siendo sustentadas por fuentes documentadas y testimonios directos.
Exigieron el cese inmediato de cualquier acción intimidatoria contra periodistas y medios de comunicación bolivianos. También pidieron al Estado boliviano a pronunciarse de manera firme y clara sobre esta situación, y garantizar la protección de los periodistas y medios afectados.
En este caso se denunció que Kailasa había inducido a indígenas a firmar contratos para arrendarles tierras comunitarias. El Gobierno, mediante Migración, dispuso la expulsión del país de sus integrantes al considerarlos parte de una secta que habían incumplido el motivo declarado de su visita, turismo.