El Athletic necesita de la mejor versión de sus futbolistas para hacer daño este jueves al Manchester United en el primer envite de su semifinal de la Europa League Y en ese aspecto los leones tienen un seguro en Nico Williams, que apostó por seguir en Bilbao para jugar en Europa con el Athletic y ahora está en puertas de la final del torneo. El extremo internacional ha convertido San Mamés en su jardín de juegos después de marcar cuatro goles en los tres últimos partidos uefos de los rojiblancos.
Nico destrozó a Inglaterra en la final de la última Eurocopa de selecciones. Marcó uno de los goles del encuentro y fue nombrado mejor jugador del encuentro. En aquella selección inglesa que perdió ante España militaban los jugadores del Manchester United Luke Shaw y Kobbie Mainoo, que saben bien cómo las gasta Nico. Shaw acaba de regresar al equipo tras un año aciago por las lesiones -sólo ha jugado 4 partidos de Premier y 2 de Europa League- y Mainoo, también perjudicado en su rendimiento por las lesiones aunque ha podido intervenir en 21 partidos de liga y 5 europeos.
Estoy viviendo un sueño. Desde bien pequeño he querido estar aquí para jugar grandes partidos
El pequeño de los hermanos Williams se ha desatado en este último tramo de competición y comparte con Iñaki el banderín de máximo goleador del equipo en la Europa League. Cada uno de los hermanos ha marcado cinco goles. Los de Nico se han dado en la liguilla, frente a Slavia Praga y Viktoria Plzen, y en las rondas eliminatorias ante Roma (2) y Rangers. El internacional con España llega al partido de San Mamés después de haber seguido un plan especial para recuperarse de una pubalgia que le hizo ser baja en el encuentro ante el Real Madrid en el Bernabéu y después sólo tuvo 25 minutos ante Las Palmas. Está descansado y con el objetivo muy claro.
“Este equipo lo merece más que nadie y espero que lleguemos a la final”, destacó en la zona mixta de San Mamés minutos después de eliminar al Rangers y al poco de conocer que el Manchester United estaba clasificado después de su impresionante victoria ante el Olympique Lyonnais. “Estoy viviendo un sueño. Desde bien pequeño he querido estar aquí para jugar grandes partidos. No puedo estar más orgulloso del equipo y de toda la gente que nos arropa. Cuando la gente te corea después de marcar un gol es algo que no se puede describir. Quiero seguir dando alegrías a San Mamés”, señaló.