El debate sobre la situación de Vinicius Junior centró buena parte del programa El Futbolín, presentado por Adrián Benedicto y Marcos Bernat, con la participación en la tertulia de Pablo Espinosa, Sergio Cerqueira y Kerman de Frutos. El foco estuvo puesto en lo ocurrido tras el último partido del Real Madrid, cuando el brasileño fue sustituido y recibió una sonora pitada desde la grada, generando una clara división de opiniones entre los aficionados.
En el programa se puso en contexto lo sucedido: Vinicius fue cambiado en los minutos finales y parte del estadio reaccionó con silbidos que algunos interpretaron dirigidos al cambio y otros directamente al futbolista. Sin embargo, como se recalcó en la tertulia, el propio jugador entendió que los pitos iban hacia él, un detalle clave para comprender todo lo que vino después.
La reacción en redes que encendió el debate
Tras el encuentro, Vinicius publicó en sus redes sociales un mensaje con tres puntos suspensivos y cambió su foto de perfil, sustituyendo la camiseta del Real Madrid por la de Brasil. Para Pablo Espinosa, fue “una rayada y una chiquillada histórica”, una reacción impulsiva que no hizo más que agrandar el problema. El gesto fue interpretado como una respuesta directa a su propia afición.
Vinicius.
El debate subió de tono al analizar el apoyo que recibió Vinicius por parte de algunos compañeros, con interacciones públicas de futbolistas como Jude Bellingham o Kylian Mbappé. Para Adrián Benedicto,“no solo es grave la actitud de Vinicius, sino que el vestuario apoye este tipo de comportamientos”, algo que, a su juicio, refleja un vestuario “insostenible” y sin un criterio claro.
Rendimiento, liderazgo y futuro en el aire
Kerman de Frutos fue más allá y relacionó esta actitud con el momento deportivo del brasileño. Recordó que lleva una larga racha sin marcar y que, en partidos clave, su impacto ha sido muy limitado. “Es momento de taparte y hablar en el campo”, señaló, insistiendo en que cuando el rendimiento no acompaña, la respuesta debe ser trabajo y silencio, no gestos de desafío hacia la grada.
Que Vinicius lleve el brazalete del Madrid muestra la falta de liderazgo que hay en ese vestuario
En la tertulia también se puso sobre la mesa la cuestión de la renovación. Según los tertulianos, Vinicius ha pasado de tener “el mango de la sartén” a perder fuerza en cualquier negociación. Se comparó su situación con la de otros grandes nombres del club y se subrayó que ahora mismo no es el referente ofensivo del equipo, especialmente con el impacto de Mbappé.
Mbappé, junto a Rodrygo y Vinicius.
El análisis se volvió especialmente crítico al hablar de liderazgo. Vinicius llevó el brazalete y, aun así, protagonizó una escena que muchos consideran impropia de un capitán. Para Marcos Bernat, “vive en un mundo irreal, anclado en una narrativa de injusticia”, sin asumir que su rendimiento actual está lejos del de los mejores atacantes del mundo.
La conclusión del debate fue contundente: más allá de un episodio concreto, lo ocurrido refleja un problema de fondo. Vinicius, según los tertulianos, está tensando la cuerda con el club y con la afición, y si no hay un cambio radical de actitud y rendimiento, su continuidad en el Real Madrid podría dejar de ser intocable. Un debate intenso que deja muchas preguntas abiertas sobre el futuro del brasileño en el Bernabéu.
